Es normal que durante el #embarazo, presentes una de sus molestias más típicas; la #retención de #líquidos. El aumento de #peso durante el periodo de #maternidad aumenta el trabajo de cuerpo para realizar actividades físicas, como resultado la circulación se ralentiza y genera la retención de líquidos, esto también se debe a que el aumento del volumen del #útero comprime los vasos sanguíneos y da como resultado, de nuevo, la retención.
Es importante que si tienes problemas o #trastornos #renales o #cardíacos, realices actividades físicas y balancees tu alimentación pues estás más propensa a sufrir de retención de líquidos debido al exceso de #sodio y la falta de agua en tu organismo. Aquí tenemos algunas cosas que puedes hacer para manejar esta molestia:
Evitar el sobrepeso.
Evitar los sitios cálidos y la ropa ajustada.
Utilizar zapatos cómodos y sin demasiado tacón.
No estar mucho tiempo de pie, sin hacer nada o con las piernas cruzadas.
Levantar las piernas mientras esté sentada o dormida.
Dormir o acostarse sobre el lado izquierdo con una almohada entre las piernas. Así se facilita el retorno venoso porque se evita la compresión de la vena cava.
Realizar baños de agua fría en las piernas, ya que mejoran la circulación.
Darse masajes de piernas. Siempre de abajo hacia arriba y con crema hidratante (mejor si previamente la ha estado en el frigorífico).
Acudir a un profesional que haga un drenaje linfático.
Hidratarse correctamente, con al menos dos litros de agua al día (unos 8 vasos). Se pueden reemplazar parcialmente por zumos naturales, sopas e infusiones.
Evitar la cafeína y los refrescos azucarados y no abusar de las bebidas isotónicas ricas en sales minerales.
Consumir frutas y verduras, especialmente algunas con propiedades diuréticas, como las verduras de hoja verde (espinaca o lechuga), el pepino, el apio, las alcachofas o los espárragos.
No comer alimentos procesados, como salazones, embutidos, encurtidos, latas y patatas fritas, porque tienen un alto contenido de sal.
Recuerda visitar a tu médico para que te de otras alternativas para manejar la retención de líquidos. Es importante que sepas que si aún realizando todas las actividades y consejos para manejar la molestia, esta en vez de disminuir, aumenta, y además empiezas a ver cambios en tu rostro, manos o cuello, debes recurrir a tu servicio de salud para que con los exámenes pertinentes descarten alguna hipertensión o preeclampsia en tu embarazo.
Para conocer más, visita:
Blog by: Maria Fernanda Salazar
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